lunes, 17 de diciembre de 2007

Esa oscuridad toda



Es la oscuridad de los poros abiertos y los ojos cerrados, la del deseo, la de las noches sin luz, la de los sueños que se van cumpliendo en cada una de las sábanas más suaves; la de los cuerpos. La oscuridad luminosa acompañada de estrellas o lunas o sueños, la que se escucha al oído y tan cerca que se siente como respiro en el cuello de la victima. La oscuridad del dinero, de las esquinas de las putas, de los borrachos en las calles solas o los vicios todos juntos en los parques. Esa oscuridad, la de los ciegos que huelen la vida en la calle, la lluvia o el frío. La desesperante oscuridad de las cajas cerradas, la de los monstruos debajo de la cama y en el closet. La de la humedad acariciante al terminar la lluvia o la bochornosa oscuridad de las olas chocantes en las playas desiertas y en el abisal océano de los peces desconocidos. La oscuridad infinita del espacio. La de todas las noches de los reos, la de los pobres, la indeseada, la ofensiva. La misma oscuridad solitaria de mirar al techo sin poder dormir e imaginar lo que hubiera pasado sin entender siquiera lo que si pasó. La primera oscuridad, la última. Esa misma oscuridad ahora, en mi cuarto, en mi duda, en el ir y venir de los carros allá afuera y el ladrido de los perros y todo lo anterior, todo junto aquí, adentro…

viernes, 7 de diciembre de 2007

De mentiras, sueños y otras cosas inciertas



A este personaje le gusta que le mientan como contarle un cuento o como disculparse porque no se acordaron de su cumpleaños. Le gusta que los hombres eviten incomodarla con sus desamorosas verdades. Y sueña, porque también le gusta soñar, que es verdad que el chico de a lado la mira como si el resplandor de la virgen la abrazara y no pudiera, él, pronunciar palabras de tan grande impresión. A ella le gusta creer en pequeñas cosas, le gusta pensar, por ejemplo, que la torta de tamal se vuelve increíblemente nada en su panza y en su lonjita de un costado, y nada los chocolates en sus caderas. Y que nadie, también le gusta pensar eso, que nadie ha notado lo triste de su estar gracias a una película cursi que la hizo soñar que, el hombre de su vida, el que si es de verdad porque lo ha visto caminando y ha escuchado sus palabras o estrechado su mano en un saludo, sí, porque soñó que ese hombre la miraba a los ojos y tembloroso tomaba su mano o abría la boca para decirle lo que ella se venía repitiendo cada vez que cerraba los ojos si aquél se encontraba cerca.

A mi personaje le gustan las mentiras piadosas y agradece cuando un buen amigo le dice de vez en cuando que ella es la más linda del mundo pero que es su amiga. Le gusta pensar que la luna siempre si la sigue a ella porque no ha seguido nunca a nadie más. Y le gusta ir despacio por la calle mirando a los hombres sin que ellos se percaten e ir imaginando que los envenena a todos y que al mismo tiempo voltean, la miran y la aman los muy envenenados.

Y de vez en cuando, pero muy de vez en cuando y muy secretamente, le gusta pensar que trabaja de noche, que vende sus besos y disfruta cada billete ganado por prestar lo que tiene en medio de las piernas, que ilumina a los hombres con sus mentiras porque nadie, ninguno, resistiría que ella les dijera la verdad…

martes, 4 de diciembre de 2007

Este pensar se ha detenido


Qué pasa si de repente mi pensamiento más abstracto se me revela y se detiene? Qué pasa? Es tal vez mi subconsciente el que me bloquea, el que no permite que me adentre porque sabe que eso me afecta de algún modo?

A veces tengo miedo…

jueves, 15 de noviembre de 2007

reconstrucción de un encuentro


Estoy en clase, (así o más aburrida), sentada y pensando en cómo perder el tiempo y me gustaría contar una historia con final feliz. Me gustaría recordar que hace tiempo la tristeza se paseaba voluntaria, caprichosamente por sus vidas, que un día de estos se vieron sin pensarlo, sabiendo que se conocían, que ya cada uno había reparado en el otro, que ya la vida los había entretenido varios años en un paralelismo juguetón, a ratos coincidente, una vez, otra, muchas casi en el mismo lugar. Pero ya lo digo, apenas hace una semana se hablaron, se presentaron, se reconocieron como los extraños que son, que ya van dejando de ser. Su primera reacción tal vez, imagino, habrá sido la sorpresa, el mundo que es un pañuelo; ¿no los vigila el destino? Ya están, ya comienzan a ser unos de los que se besan y pretenden sonreír cuando recuerdan su tristeza, su sola búsqueda.


Y no importa, ya no importa en que termine.

Todo.

Esto, lo que se les huele hoy cuando te les acercas un poquito o cuando los miras a los ojos o si de casualidad los topas en la calle y los ves sonriendo como invitándonos a la felicidad.

Eso es lo que vale, lo que brilla, con lo que se quedarán cuando todo acabe.


¿De alguna manera todo acaba no?

martes, 6 de noviembre de 2007

Aquí estoy, no me he ido...



Pues aquí estoy, no me he ido. He estado súper ocupada y bueno, ya sabrán los que me conocen todas las cosas que me han pasado. Para los que no, rápido les cuento que falté dos semanas a clases, debo admitir que la primera fue por gusto, pero en la segunda, como ya les había anticipado, me enfermé horrible, estuve tirada en la cama sin ganas de hacer nada, sin siquiera poder concentrarme en una lectura placentera. La consecuencia de todo esto ha sido mi estrés, la semana pasada y ahora esta, me la he vivido corriendo para ponerme al corriente, exámenes, trabajos, tareas atrasadas; y eso por un lado, también se me juntaron las presentaciones de la banda. Este “puente” que debí designar para descansar un poco y terminar de ponerme al corriente, lo dediqué a cantar. Como muchos saben, el querido Pool ya no está más en la banda. Ahora tenemos al Señoriíto Mauricio M. M. Que bien se ha aplicado y se ha estrenado en pleno zócalo de la ciudad de P. De los A. El punto es que estoy hecha una piltrafa, apenas si veo a mis amigos, no he dormido bien, ni he comido bien y hasta hoy he tenido tiempo de sentarme a escribir y comentar. Ahí les van unas fotitos:
Ahí estamos en el zócalo de P. de los A.
Él es el Srito. M.M.M. (nuevo guitarrista)

Resulta que gracias a estos múltiples eventos, de las pocas cosas que me han dado tiempo es de platicar mientras voy manejando y vieran que es bastante relajante (aunque me distraigo más de lo que debo). Una de las cosas que llegué a platicar es lo que me ocupa en el post de hoy.

¿Por qué alas personas les cuesta tanto trabajo comunicarse? Tal vez no se han percatado de esto, pero todas las lenguas del mundo son capaces de transmitir todo lo que queramos expresar, no tienen barreras. Con un número limitado de letras, podemos crear un número ilimitado de mensajes.
Y es que un cuate y yo comenzamos a platicar acerca de los anónimos. Sí, es cierto. Al escribir en Internet ya estamos sujetos a cualquier critica. Es muy difícil aceptarlas, es muy difícil . Lo fácil es criticar y poner cualquier grosería con tal de joder y escudándose en un anónimo. ¿Qué tan difícil es decir –hola soy fulanito, no me gusta como escribes- o –hola soy fulanita vete a la #¿”$5& te detesto-. Mi cuate y yo concluimos que a pesar de lo hirientes o chingativos que pueden llegar a ser los comentarios de las personas, siempre apreciaremos más la sinceridad a la hipocresía. A ti, anónimo chinga quedito te digo que existen las criticas constructivas, las elegantes, las inteligentes. Al final de cuentas si no te gusta lo que escribo no lo leas y ya, hay un sin fin de blogs en este mundo como para que pierdas tu tiempo leyendo y comentando uno que te pone de malas o no te gusta.


PS. El tipo de anónimos chinga quedito está en todos lados, no sólo en internet, qué poco interesante (o aburrida?) ha de ser su vida, que les da tiempo hasta para gastarlo en cosas que detestan.



PS. Ya estoy bien!

martes, 23 de octubre de 2007

Mientras tanto...

Pues sí, ya estoy de regreso pero déjenme les cuento amables y comprensibles lectores, después de disfrutar tanto del caribe y su calor, llego y me encuentro con este clima de la… que no hizo más que provocarme una infección horrible en la garganta. Hoy ya me siento un poco mejor; ayer estuve tirada en mi cama todo el día, con mucho frío, fiebre y mareos (¿mareos?), mi cuerpo totalmente sin fuerzas, como dispuesto a testar. Ya tenía muchísimo tiempo que no me enfermaba así de cañón y la neta no se lo deseo a nadie. Sé que sabrán disculparme por haberme retrasado en el post, mientras, los dejo con algo que escribí un día antes de enfermar:



De repente me rodeaba el paraíso. Con mi amigo Ché a un lado, no alcanzaban mis ojos a mirar más que la luz reflejada en el azul pacífico del río. A veces boca arriba, contemplando el cielo, las hojas de la selva refrescaban mi latir. Otras, sumergida en la transparencia del agua, apenas recordando la niñez, observaba de cerca los peces y la vida que se detenía a gritarme su paz.
Quién más sino el silencio, en ese instante podría acompañar la placidez de mis suaves movimientos, de la calma de mi aire, quién más sino el silencio puede hoy evocarme la leve imagen del azul entre mis dedos.
Después de este encuentro de mariposas y senotes, de tortugas árboles y veredas, del mar y los peces. Después de los ríos y la selva, después de llenarme de paz me fui buscando el caos…
Eso era, las mañanas húmedas y calurosas, nuevas caras, pláticas envolventes y noches interminables de frenesí en la ciudad blanca. ¿Qué más se puede pedir? Vino, amigos, música, literatura…

viernes, 12 de octubre de 2007

Luego nos vemos



Queridos (cinco) lectores, sé que no me van a extrañar, pero de todos modos les cuento que me voy de "congreso" a Yucatán. No escribiré sino hasta el 22 de Octubre. Al regreso traeré sorpresas y muchas fotos!


Gracias


PS:Luego nos leemos.


lunes, 8 de octubre de 2007

Un poco defectuosa


Es un hecho, los que no me conocen no se extrañaran de esto pero sí, soy muy distraída, de verdad, lo soy. Desafortunadamente este andar por la vida sin fijarse y a veces sin preocuparse no es tan divertido como debiera, de hecho tiene muchas desventajas. Lo peor, para mi gusto, es cuando uno toma conciencia de su despistada personalidad (por lo regular es gracias a que alguien más lo notó o le afectó antes que a ti). Es horrible darte cuenta de que se te olvidaron las llaves y no hay nadie en casa, o quizá simplemente no viste el letrero de no fumar, pero a veces es peor. La semana pasada me acordé de un examen la noche anterior, afortunadamente el maestro lo pospuso, pero de todos modos estuve toda la noche en vela estudiando como loca y con la presión a cuestas, tan sólo por una distracción; nadie me va a reponer las horas de sueño. A veces tengo suerte, o no, creo que desde que me di cuenta de mi defectito trato de arreglármelas para no ser victima de mi misma tan seguido; mi familia, sabedora de la situación, me ayuda de vez en cuando. Personas como yo debemos recurrir a todos los medios posibles (claro esto no incluye los tropiezos o golpes con la silla, la mesa, alguien más…no darle de comer al perro, el agua de las plantas en fin…) Mi pequeña solución, mi queridísima agenda. Uso agenda desde hace cinco años, “bendita seas”. Ella lo tiene todo, o bueno, casi todo, por lo menos ya me acostumbré a llevarla a todos lados y escribo en ella lo más importante, las fechas, los exámenes, cumpleaños. Sólo por ella mi vida no es un caos. Lo malo es que si por alguna razón olvido anotar algo, simplemente no lo hago y punto, si no está escrito no existe en mi futuro próximo. A si que si alguien necesita algo de mi, asegúrense de que lo escriba en la agenda…
Ah, por cierto, todo esto surgió a raíz de una conversación con un amigo que se empeñó en que le dijera lo que no me gustaba de él. Casi se me olvida que quería escribir este post…buuuu. En fin, creo que mi distracción es una de las cosas que me molesta de mí.

1.PS. Haber, haber, platíquenme sus defectos

2.PS. ADVERTENCIA: se agrega a este blog la sección "así me siento hoy" en honor a todas esas canciones con las cuales llegamos a identificarnos en algún momento. Se aceptan sugerencias, peticiones epspeciales y reclamos!

martes, 2 de octubre de 2007

A propósito del 2 de Octubre


Desafortunadamente nos hemos dejado guiar por el sistema desde hace ya un buen rato, la juventud ha tomado el camino más fácil al dejar la trinchera por vestir a la moda. Hemos aceptado el papel que inteligentemente el estado nos ha brindado, pues al darse cuenta este último de la fuerza que representamos y el peligro en el que podemos llegar a convertirnos ha preferido invertir en tecnología de punta, entretenimiento barato y educación paupérrima antes que dejarnos caer en la cuenta de todo lo que podemos cambiar si razonamos y nos ponemos de acuerdo.

Los rebeldes sin causa, el movimiento hippie; lejos estamos ya de recordar o siquiera saber por qué a estos jóvenes se les acabó la paciencia y optaron por tomar cartas en el asunto. De ellos tal vez nos queda la música o la moda, a nosotros sólo nos vendieron su imagen empaquetada ya en un mercado de consumo en donde vales por lo que tienes o por lo que puedes comprar. A ellos eso no les importaba, ellos tenían ideales que se representaban, claro, en su ropa y en su estilo de vida, cada detalle tenía un por qué.
Si recordamos un poco a los chicos de chaqueta de cuero, pantalones de mezclilla y tenis converse automáticamente nos viene a la mente la película “Vaselina” pero eso no nos dice mucho, los jóvenes de los años 50´s salían apenas de una segunda guerra mundial, el nacionalismo gringo estaba en la cumbre y ellos no entendían exactamente por qué, pero les molestaba la idea de vivir dentro de un sistema en donde la juventud era casi inexistente, en donde la vida de cada cual parecía ya trazada. Su vestimenta fue resultado de lo identificados que se sentían estos jóvenes con los trabajadores de las grandes industrias, las cuales por los años 20 comenzaron a enriquecerse gracias a la explotación de la mano de obra; en esa época este look era de lo más bara y aguantador.

Para los hippies quienes habían dado cuenta de la violencia en la que desembocó la rebeldía sin causa de sus predecesores, se pusieron las pilas y se les ocurrió que el pacifismo era la vía correcta (desafortunadamente no vivimos entre flores y color, pero esa es harina de otro costal). A ellos les pareció buena idea el rollo este del primitivismo ya que para esos momentos, la antropología comenzaba a estar de moda y se había llegado a la conclusión de que los hombres de la edad de piedra vivieron felices bajo las normas del comunismo primitivo. Por eso su moda rudimentaria y mugrosona, ellos querían hacerlo todo, su ropa, sus accesorios, hasta vivir en comunidad cuales buenos cavernícolas; con esto lograron cambiar muchas cosas, algunas se olvidaron junto con el movimiento otras se nos pegaron un poquito como la liberación sexual o la igualdad de géneros y razas.
Para nosotros lo que de verdad importa es la moda, estar al día, el bling- bling. Pantalones de mezclilla hasta en $5mil varitos, moda hippie de las mejores marcas, tennis converse para todos los gustos ah, y si algo de esto te interesa, seguro lo más mono lo encuentras en el palacio de hierro. Caray hasta los aretes artesanales de hilo o piedritas son “made in china”.
Ya nada nos importa. ¿Por qué? Cada uno no es tan culpable como parece o como nos han hecho creer. Si desde pequeños nos educa un sistema capitalista al que no le interesa más que perpetuarse en el poder ¿Cuánto podemos aprender? Nadie nos enseña a analizar a nuestra sociedad, menos a proponer, ni siquiera a defender lo propio. Claro, esto no nos justifica, cada quien es dueño de su propio destino. Y es que esto no se arregla solo, tal vez el gran cambio no esté en nuestras manos, muchos pensarán que no vale nada poner un grano de arena, nos han inculcado una sumisión y una flojera convenenciera como patrimonio nacional y les ha funcionado a la perfección. Yo creo que hay que estudiar para saber en dónde estamos, de qué derechos gozamos y qué nos toca hacer para el bien común ¿el mundo es de todos no? El saber es el arma más poderosa, es la única vía que tenemos en contra del sistema. El que sabe no es manipulado, ni se queda callado porque no le teme a sus palabras, porque su mismo conocimiento le da seguridad. El que sabe analiza el problema hasta encontrar solución por que sabe que la hay. El que sabe tiene la capacidad de transmitir su conocimiento a otro que podrá algún día enseñar a alguien más. No sería maravilloso que todos tuviéramos conciencia del poder que significa ser joven? Los jóvenes son hoy los protagonistas principales de los cambios más importantes en la sociedad. ¿Será que de verdad podemos cambiar el mundo? Hay que correr, brincar, gritar, luchar por los sueños más absurdos, a esta edad se vale todo, hay que hacer de todo ya…
Para muchos la juventud es una enfermedad que se quita con los años.


PS. 2 de Octubre no se olvida
PS. Ahora entienden por qué la tele me aburre?
PS. Ahora entienden por qué dar clases es mi forma de cambiar el mundo?

martes, 25 de septiembre de 2007

sólo te escribo para que sepas que ya no pienso en ti


Ya es tarde.


Piensas en ella a pesar de decir que no la quieres o que la has olvidado. Sabes de ella, aunque aparentes, aunque finjas la indiferencia abismal del silencio. Es casi de madrugada y estás ahí, acostado e imaginando tu próxima osadía.


Es extraño, tus sentimientos ahora se encuentran.
Ya es tarde, así lo decidieron.
Estás recordando la vez del último mensaje. Sólo escribió para decirte que te amaba a pesar de todo, que te amaba desafortunadamente. Trataste de evadirla, y nada, un nulo esfuerzo.
Sabes todo el daño que le has hecho, sabes que tus reacciones a su sonrisa no han sido más que desesperados intentos por hacerte creer que la has olvidado.
No puedes.
No la olvidarás nunca.
Ella tampoco.
Te duele tanto darte cuenta del error cometido, habías supuesto ya no ser nada en su vida, habías pensado que tu última artimaña para olvidarla le había echo más daño que a ti, y sí, ella lo dijo – adiós para siempre-. Ingenuo, no lo sabías, no lo sabes aún, no sabes que ella… no.
El olvido ha creado confusión… no es cierto, no ha llegado. Ella sigue ahí.
Hace un par de horas el alcohol te ha hecho mandarle un mensaje diciéndole: “sólo te escribo para que sepas que ya no pienso en ti”

jueves, 20 de septiembre de 2007

Boleros


Un bolero. Cuantos recuerdos me puede traer un bolero. Son simplemente inevitables. Todos hemos crecido escuchando boleros lo mismo que rancheras, son parte de lo clásico, y de una forma u otra están inmersos en nuestros recuerdos.
Ayer fue una doctora belga (de Bélgica, no piensen tanto) la que llegó a darnos una conferencia sobre boleros. ¿Cómo los conoció? ni ella lo sabe con certeza. El hecho es que me dio un buen pretexto para postear algo.
Cuantos sentimientos envuelven los boleros escuchados en la radio del abuelo, vistos desde las lágrimas de mi madre en la cocina o desde el asiento de un bochito taxista. Ya un hondo suspiro me recorre y con él, el placer tortuoso de los amores perdidos, el blanco y negro de las películas, tríos incansablemente trasnochadores, la voz de Toña la “negra”, libros, muchos libros. No sé cuantas cosas giran en torno a ellos, algunos de mis más tristes días, eso seguro.

Hoy me puse a escuchar un poco de boleros, qué tal es ese que dice:

Eres mi bien,
lo que me tiene extasiado
porque negar
que estoy de ti enamorado…


Queda perfecto, combina con todo no?

sábado, 15 de septiembre de 2007

viva méxico?


Sí, lo admito, yo también voy a salir esta noche y tal vez me peine de trencitas o me ponga una blusa bordada; también voy a comer hasta hartarme mole de panza, pozole, chanclas. Sí, voy a ir a parrandear con mis cuates hasta ver salir el sol. Todo eso voy a hacer hoy, como cualquiera. Parece que, al fin y al cabo, la costumbre nos gana a todos.
Lo triste del asunto es ver como nuestra identidad se reduce, para la mayoría, a un señor con bigotes falsos y sombrero vendiendo banderitas en la esquina. Lo triste es observar a toda la gente gritando por una libertad que nunca ha experimentado; por unos ídolos que no conoce, soportando a un sistema que nos ha cosificado por completo. ¿Qué tan libres podemos ser cuando nuestro presidente no es nuestro presidente, cuando nuestra vida se rige bajo las leyes dictadas por un puñado de indiferentes “representantes” comprados, vendidos, rematados, inconscientes del daño a las masas?

Sí. Es quince de septiembre y como cada año, los mexicanitos celebramos nuestra independencia!



PS. Tal vez la patria tenga que esperar de nuevo a que sus hijos no tengan nada que perder...

jueves, 13 de septiembre de 2007

Ausencia



Desde hace tiempo he estado pensando en la ausencia.

Qué es sino unos labios hablando al retrato de un muerto. El árbol estruendoso cayendo en mitad de la nada. La boca seca de un borracho solo y perdido en el bar al que he llegado. La sensación de espera en una habitación vacía mientras un joven mira al techo apenas movido por una leve línea de aire diluyendo el bochorno de la noche en su cabello. ¿Qué más puede ser si no son todas las imágenes trilladas del mundo, plasmadas en un papel, con la añoranza siempre de ser leídas por la persona correcta?

Pero la ausencia es necesaria, incluso puede ser placentera si vives con la esperanza, porque todos esperamos pacientes el placer infinito del encuentro. La ausencia es deseo. Todos, en algún momento, imaginamos que un día caminando por la calle, tan indiferentes y tan ausentes como cualquiera (porque la característica de la gente que camina por la calle es precisamente la ausencia), nos toparemos con alguien que alce la cara y nos vea con los ojos más transparentementeexpresivos y puros de tanta felicidad producida por el simple, el casual encuentro inesperado. ¿Qué tal si bajamos del camión o salimos de clase, de la oficina, del lugar más triste en el planeta, de nosotros mismos? ¿Qué tan dispuestos estamos a sonreír? ¿Qué tanto depende de las circunstancias?

No hay que responder, hay que estar alerta, hay que atrapar la mirada y sonreír. Al final de cuentas los instantes son lo único que realmente dura. Mi felicidad está basada en instantes que pasan todos los días y me recuerdan que estoy viva y que puedo si quiero exprimir las sonrisas que voy recolectando en el camino, beberlas, vestirme con ellas y salir a caminar para que alguien hoy o mañana sonría conmigo.
Ps. Citando al buen Beno ¿por qué la gente se empeña en creer que si alguien escribe, .siempre escribe a cerca de su vida? Es cierto, todo tiene que ver con algo que has vivido, pero no siempre lo vives en carne propia, la mayor parte de las veces eres un es´pectador más.

domingo, 9 de septiembre de 2007

Mi juego predilecto



Ahí se iban perdiendo las ganas, entre todos, entre tantos que nunca nos dejaban solos. Ahí, en el silencio orgulloso, en el espacio suspendido se perdían mis ojos para no fingir una indeseada indiferencia. Mis piernas, a veces frías, se alejaban sin titubeo, deshaciendo el impulso, descuidando las formas habituales, tratando de mejorar…
Y te alejaste.

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-¿Quién pudiera pensar en estallar de repente a lo ojos del veneno?-

-Quiero que tus labios me pronuncien, que tus pasos me sigan compulsivos a todos lados hasta que tenga que decirte que hoy no, que mañana.-

-No mientas, no finjas, no me subestimes, ya sé que sabes, ya sé que me miras. ¿Verdad que me miras?-

-¿Qué quieres?-

-Estoy esperando que me digas lo que deseo escuchar. No quiero descubrirte con los ojos vacíos.
Quiero saber si me miras cuando cierras los ojos tirado en la cama antes de dormir. Cuéntame, dime algo, sorprende a mis oídos, grítales que eres tú el que llena mis pulmones, el que me hincha toda de vida; diles que sabes que me deshago y que lo sientes porque ya has caído en mi trampa, porque ya te has bebido mi saliva, porque estás envenenado.-

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Y sé que tal vez ni me piensas, pero me gusta disfrutar la circunstancia y estar conciente de la realidad. Me gustas porque sueño, encuentro en ti lo que imagino. ¿Eres como te imagino? Cierro los ojos y me entretengo buscando tu excusa perfecta, o lo que me dirías si de repente mañana descubrieras que si, soy yo y existo. No sé. La duda parece mi juego predilecto, la incertidumbre…

martes, 4 de septiembre de 2007

Disculpa


Querido Lector:

Ahora que la humanidad crea y descrea tantas cosas, lo efímero es lo único que de verdad permanece. Baste decir que mi triste computadora está ya más vieja que antes, a veces respira, a veces. Algo en ella me dice que ya no puede, que le resulta difícil seguir en pie de lucha. Pero ¿Qué hacer con tanta basura industrial? ¿Acaso existe un panteón de computadoras? ¿Será que estamos condenaos a un futuro lleno de deshechos in-desechables? El punto es que mi papá se rehúsa a deshacerse de ella y de su hermana mayor que es aún más sabia y anciana. Lo sé, son parte ya de la familia pero cada día resultan menos serviciales. A veces recurres con cariño a ellas porque guardan muchos recuerdos y hay otras en las que simplemente te gustaría aventarlas por la ventana o abandonarlas nomás de pura desesperación (no sé por qué recordé a mi abuela). Sé que no es pretexto pero esa desesperación de no poder trabajar con ellas es lo que ha detenido mis publicaciones. El blog simplemente ya no abría, no he podido ingresar a ninguno, ni siquiera a los de mis cuates para echarles una firmita. Creo que ya puedo publicar pero sigo sin poder ver lo que pasa. Sólo espero que esta ceguera no sea permanente.

Mis más sinceras disculpas.
San.

lunes, 6 de agosto de 2007

Pausa

Lo dijo. No quería decidir en ese momento y nadie lograría obligarlo.
-Hoy se me chorrea el miedo desde las manos, hoy las contradicciones le ganaron a la aventura. He luchado durante mucho tiempo contra mis prejuicios, ya he logrado borrar los que estaban con lápiz, con tinta algunos. Hay cosas que traigo en la sangre y sí, como todos en algún momento he pensado en voltearme las venas. Parece que le ando huyendo a la felicidad. Parece que no quiero, pero ya me he dado de topes muchas veces, estoy en pausa. La estabilidad es algo que difícilmente se consigue, hoy siento mi equilibrio. Tengo miedo.-
Nunca es para siempre.

jueves, 2 de agosto de 2007

De vacaciones


Por fin me llegó la hora. Con todo y mi almohada de luna (no la suelto cuando viajo) cambié la linda carretera federal por arena, sol, playa y un tinaco vacío.
Llegamos a la playa y después de un largo viaje todos pegajosos y cansados nos peleábamos la regadera. No había agua. Resulta que en Acapulco el agua escasea. No sé mucho del tema pero según yo varios ríos desembocan por ahí y eso se refleja en la abundancia. No lo sé. La certeza que tengo es toda una semana bañándonos en los baños públicos de las playas, mi morral favorito oliendo a pescado, la no siempre relajante compañía de mi familia, joly’s y nieve de coco, mucha nieve de coco.
El viaje fue un poco pesado pero siempre me ha gustado ver el paisaje. A partir de Atlixco el borde de la carretera luce vegetación y flamboyanes. A mi me gustan los flamboyanes, así que le hice prometer a mi papá que me compraría uno de regreso.
Ya en Acapulco, el primer día fuimos a la playita en la noche, afortunadamente en la tarde había caído agua suficiente para que nos bañáramos, todo normal, tranquilo, al segundo día ya estábamos sufriendo porque nos dijeron que el agua caería hasta el miércoles y ¡era Lunes! Tratamos de ahorrar lo más que pudimos, nos bañamos en las regaderas públicas, que también sufrían la escasez, imaginen el resto. Lo malo estuvo al regreso pues mi Maye nos había cocinado unos deliciosos camarones al mojo de ajo pero se le ocurrió dejar el recipiente con lo que sobraba en la camioneta y a la hora de partir, todo se regó en mi morral. Ya se imaginaran el lindo aroma, todo se complicó con la escasez de agua, no lo pude lavar inmediatamente, ahí se quedó el pobre, guardado en una bolsa de plástico y rodeado de moscas, apestándose cada día más; el miércoles finalmente recibió ayuda de agua y jabón pero ya era demasiado tarde, el olor había penetrado lo suficiente. Seguiré tratando.
Al otro día ya saben, las vacaciones son aventuras, nunca faltan los niños llorando o las hermanas rescatadas por surfistas en el revolcadero.
Y es que en una de esas, las olas se pusieron bravas y a pesar de no estar muy desesperadas, mis hermanas fueron sorprendidas por lugareños que con tal de ganarse una lana le hacen de a salvavidas voluntarios; pero ojo, estos sujetos si salvan vidas y se les agradece, a pesar de eso también piden dinero a cambio; imagínense que llegaron cuatro de ellos con Elborrego y tres con Chostif, ¡cada uno quería cincuenta pesos! Al final todo se arregló con un par de chelas, unos refrescos y cincuenta pesos para todos.
Los demás días transcurrieron sin mayor percance, hasta que se nos acabó el veinte, hoy regresamos de la playa, pero no con las manos vacías, mi papá cumplió su promesa y en el vivero “los chapulines”, en Oaxtepec, estacionó la camioneta.

Qué lindo lugar, enorme lugar lleno de plantas y árboles que nunca había visto, bueno, la mayoría eran nuevos ante mis ojos, el que más me llamó la atención fue el majestuoso árbol del pan, no sé de donde viene pero sus frutos son inmensos y su sombra muy refrescante. Fuimos atendidos por un señor ya grande que tenía cara de árbol y, como ellos, estaba lleno de paz, también de tierra; nos dio un pequeño tour por su enorme vivero, nos regaló frutas exóticas y nos vendió un hermoso flamboyán que yace ya en mi jardín un poco chiveado por el nuevo clima pero esperando el pedazo de tierra que le será asignado.

domingo, 22 de julio de 2007

Aniversario DIONÉ


Para los que no lo sepan, mi cumple es al otro día así que es doble festejo. Los espero a todos y para los que no sepan llegar, denle click a: www.myspace.com/lacuica

martes, 17 de julio de 2007

Una história verdadera




Amables lectores:
El siguiente post va dedicado a Mari y a Lili, mis queridas a migas de la prepa. (Soy mujer, soy cursi) Desafortunadamente y por razones que desconozco este año recordé sus respectivos cumpleaños demasiado tarde, por eso y para revivir aquellos tiempos les dedico las siguientes líneas:


Hace ya tres años que me gradué de la prepa y aún sigo añorando los lunes de ceremonias y el uniforme que nunca pasaba de moda. Si que las extraño amigas mías. Y es que el ir a la misma escuela y con los mismos compañeros durante quince años no es cualquier cosa. A mi me gustaba ir a la escuela a ver a mis amigas, a contarles lo que me pasaba y reunirnos en las palapas o tiradas en el piso de la cafetería hablando de trivialidades, comiendo paletas de hielo de dos pesos o papas del “luchas”.Planeamos, como si fuera lo más importante en nuestras vidas, nuestra ceremonia de graduación. No será lo más importante, por supuesto, pero fue lo último que hicimos todas juntas.

Un día de tantos en los que nos reuniríamos para platicar en torno al gran evento, me prestaron la moto, por primera vez iba a llevar mi motoneta a la escuela. Quién lo hubiera imaginado!
Ese día salimos temprano de la escuela porque ya habían terminado las clases, íbamos tan sólo a los ensayos de la ceremonia de graduación. Mi amiga Pao acababa de pelear con su novio y para consolarla y presumir un poco, por qué no, la invité a dar un paseo en la moto. Apenas si nos alcanzó el gusto para salir de la escuela. Antes de llegar a la esquina nos estampamos contra un carro y ella salió volando. Todo pasó muy rápido, recuerdo que vi a un “loma bestia” cerrarme el paso al querer rebasarlo. Estábamos en el suelo con la motoneta deshecha y cara de no saber que hacer. Afortunadamente no íbamos tan rápido como para que nos pasara algo grave, las rodillas raspadas de mi amiga y unos cuantos raspones en mis brazos y piernas, nada que no se remediara con curitas y pomada. El caso es que no pasaron ni cinco minutos para que todas las ambulancias del mundo llegaran a asistirnos pues varios amigos alcanzaron a ver el accidente y se les ocurrió llamar hasta a los bomberos que con todo y pipa llegaron a asistirnos. Qué escándalo, en pleno boulevard cinco de mayo, el uniforme de la escuela y con todos nuestros cuates alrededor. Lo bueno fue que a Pao se le olvidó el novio. Lo malo: mi amiga tenía planeado usar un vestido corto, mis padres me dieron la regañiza de mi vida y me quede sin moto.

Al final de cuentas en ese momento vernos era lo más importante, reír era lo más importante.


PD. Pao sigue con su novio, ahora su esposo y van a tener gemelas en menos de dos semanas (felicidades).
PD.2 Feliz cumple Mari
PD. 3 Feliz cumple Lili
PD. Las quiero Qüijas

martes, 10 de julio de 2007

Adelita y el chapulín



El siguiente relato responde a la convocatoria del Beno, espero que les guste:
.

Adelita estaba soñando.
- no, estaba despierta- no, soñando- no, despierta…
En fin, lo importante es que Adelita estaba ahí. Delgada y con el vestido rasgado de un lado, la calceta del pie derecho sin resorte y un chapulín entre las manos. ¿Cuál habría sido la causa de su mal vestir? Nunca lo sabremos. Tomaba al pequeño insecto con la brusquedad de los niños de su edad, de repente lo suspendía de una pata o lo guardaba en la bolsa. Adelita gozaba atrapando al chapulín o dejándolo ir.
¡Una pata! Demasiado brusca había sido la manera de volver a atrapar al chapulín, la pata de este yacía desprendida y aún con movimiento frente a los ojos de la pequeña.
Ya no podía hacer nada, la pata comenzaba a crecer desbordantemente, poco a poco incorporada, un salto, otro, otro. Adelita gritaba y corría.
El cansancio era sofocante y la solución parecía escapar de su comprensión.
Un olor fétido rozaba su olfato y le agobiaba las ideas.
Adelita despertó. ¿O se quedó dormida?

jueves, 5 de julio de 2007

*No


Ayer lo vio.
Estaba sentado en una de las bancas del patio, vestido con la indiferencia que provocan una vieja playera y un pantalón de pans. En la mano izquierda un cigarro, en la derecha la sucia libreta de siempre, dejando asomar un poco de su personalidad. Ordinario. ¿Uno más? Pero él sonreía; por los ojos se le escapaba un hilo de luz, quizá de “esos momentos”.

A ella le pareció que un saludo cortante sería lo apropiado, sus ojos siempre tendrían un poco más. Supuso que él era feliz, que aquella indiferencia podría provocar reacción alguna.

La verdad: para él un fin de semana bastaba. Era feliz.

Ella sintió el no indiferente, discreto, pequeñito, asomándose desde la burla socarrona del silencio.
El no rotundo de la soledad.

Se alejó.

Se fue para siempre.

*
**


EL PURO NO
.

El no

el no inóvulo

el no nonato

el noo

el no poslodocosmos de impuros ceros noes que noan noan noan

y nooan

y plurimono noan al morbo amorfo noo

no démono

no deo

sin son sin sexo ni órbita

el yerto inóseo noo en unisolo amódulo sin poros ya

sin nódulo ni yo ni fosa ni hoyo

el macro no ni polvo

el no más nada todo

el puro no

sin no

.

Oliverio Girondo

miércoles, 27 de junio de 2007

Nada, ningún sueño


Hay hombres que luchan, corren, gritan, vuelan, arrebatan lo que quieren y nada sino la desilusión o el desgaste los hace soltarlo.
Mi hombre es el caos.
Mi hombre es la maravilla en las manos, en los ojos.

Adentro mi hombre tiene algo que callado espera, sólo y, grita si me mira y puedo sentir como me mira, como late pero no puede.
Mi hombre no sabe qué hacer cuando es feliz. Teme destrozarse pero a cada acto se consume. Él ha hecho todo por alejarme, cuando más cerca hemos estado decide aterrizar, bajar, arrastrarme lo más que puede.

Hay hombres que alejan lo que quieren. Sé que lo nuestro ya no son las alas en el aire.

Hoy decidí mirarlo, hablé fuerte, hablé sin que quisiera escucharme, sin remedio; en sus ojos vi latente su desesperada voz que no pudo decirme lo necesario. Le duele.
Mi hombre es él, el humano.
Yo lo quiero. No lo entiendo. Ya no es mío.
Ya no puedo…

sábado, 23 de junio de 2007

PENSANDO A TRAVÉS DE MIS OJOS


Afortunada o desafortunadamente cuando abro los ojos asocio lo que veo con mi vida, lo hago mío, lo pienso, lo digiero.
Hoy he abierto los ojos y no estabas, no se me secaron; no fue necesario esconder las lágrimas porque hoy no salieron. Hoy distraje la mirada con la noticia de la semana, caminé, huí de ti sin querer, salí de mi casa, subí al auto para ponerme a pensar en las posibles vidas de los conductores quienes distraídos o furibundos no tenían más remedio que esperar al margen de un semáforo. No me hizo falta tu recuerdo.
Es asombroso el poder lento y diáfano del tiempo.
Pero más diáfano es el sonido, diáfanos se convierten los parpados si los cierro y rondando mis oídos se pronuncia tu nombre, un espacio de tiempo muy corto a través de muy cortos tiempos de espacio, qué catástrofe no poder clamar por el silencio, ya no tiene caso. El abismo, la caída libre, la desesperación de lo inevitable.
Tu recuerdo.
Ahora lo sé, no he podido abrir los ojos, la diafanidad se ha ido, he estado tratando de guardar silencio, de todas formas escucho mis pasos arrastrar el polvo trise del vacío. Tengo que esperar otra vez, otra vez tu recuerdo me ha dejado contigo. Mi esperanza es en el abandono, mi esperanza se refugia en mis ojos que se abren sin toparse con los tuyos.

viernes, 22 de junio de 2007

La casualidad más grande de mi vida



Cuando niña siempre quise cantar, ser famosa, tener fans, subir a un escenario. ¿Cuántos niños no sueñan con eso? Al fin y después de no sé cuantas canciones memorizadas, doña Maye decidió integrarme a un coro. Cantar, cantar, ya no hacía otra cosa, ya no podía pensar en otra cosa; resultado: bajas calificaciones y el fin de mi carrera como cantante famosa o bueno, eso pensé.
Toda la vida está llena de música. Toda la vida está llena de casualidades, de hecho podríamos decir que la vida está hecha de casualidades. Casualmente decidí estudiar letras y no diseño, casualmente mis intentos de ser cantante hasta entonces no habían tenido éxito, en mi primer cuatrimestre tuve como compañero al señor Bikini, también por casualidad. En fin, la música siempre fue una constante en mi vida y gracias a todas las casualidades, que algunos saben ya de memoria y otros tendrán que imaginar, hoy tengo una banda. Dioné, no es la más famosa del mundo, no tenemos un futuro excelente y prometedor pero casualmente a Pool, a los Ponchitos, al Bikini y a mí nos gusta juntarnos a componer y tocar y tocar todo lo que podemos cuando podemos. La libertad que representa la música y sobre todo un escenario es muy parecida a las alas abiertas. A mi me gusta volar, a ellos también.

Es sólo que el pasado día del “padre”, en mi familia decidimos darle alegría al abuelo, el abuelo sólo, el abuelo necio, EL ABUELO. Cómo todos los abuelos cree firmemente en su razón, hasta ahí podríamos pensar que es un abuelo como todos, pero no señores! Mi abuelo es “superman”, así suelen llamarle los que lo conocen, amables lectores imaginen por qué.
El punto es que superman no se queda callado y con tres botellas de Torres 5 vacías, pues menos. Mi abuelo habló, habló conmigo y rotundamente de su boca salieron las siguientes palabras: “mija no sirves para roquera, dedícate a otra cosa, por qué no cantas algo tropical, lo tuyo no es el rock, no es para ti. Si te digo esto es porque te quiero y como tu abuelo, quiero lo mejor para ti, pero de verdad mijita deja el rock”
¿Será que los borrachos y los niños dicen la verdad, será que mi abuelo no quiere ver a su antes dulce nieta, brincar y cantar en el escenario al ritmo de una música que no entiende? No lo sé, todas las casualidades de mi vida no siempre se corresponden. La mayoría me ha orillado a hacer y ser lo que soy, ya el tiempo se encargará de enfrentarme con la casualidad más grande de mi vida.
Por lo mientras chequen esta dirección en la que podrán encontrar un video de mi banda:

jueves, 7 de junio de 2007

El TOPO



Hace algunos instantes y por mera casualidad el séptimo arte vino a toparse conmigo. No me había topado con él de esta manera y resulta que hoy este titulo y la frase inicial de esta película del chileno Alejandro Jodorowsky me vino a dar de vueltas en la cabeza. No recuerdo literalmente dicha frase pero más o menos es esta: El topo pasa su vida cavando en busca del sol, cuando al fin lo encuentra queda ciego.

Después de escucharla tan cierta y tan aplicable a la vida del ser humano, no pude más que pensar en la idea. El hecho común de la inconformidad, el instante, la efímera felicidad. Pero si al fin y al cabo de eso se trata todo, ahí está la causa por la cual vale la pena mi vida.
Los que me conocen me darán la razón, algunos tienen derecho a sentirse aludidos.

Toda la vida me la he pasado buscando, qué? no me pregunten qué, tal vez la felicidad. Resulta muy sencillo mi caso como el de muchos otros. Qué pasa entonces, a veces tengo la sensación de que ya estoy ciega, de que ya no es posible volver a abrir los ojos y distinguir sin temor eso que tanto ando buscando. A veces lo sueño, intento pensar que aún no lo he encontrado. A veces intento conformarme y miro hacia atrás con la única certeza del placer del instante cuando creo haberlo(te) encontrado y sonrío. Pero luego me doy cuenta de que sí ya lo sé, estoy ciega y quiero ver.
Muy a propósito aquí les dejo otro poemita de don Oiverio Girondo:
PLEAMAR
Nada ansío de nada,
mientras dura el instante de eternidad que es todo,
cuando no quiero nada.

lunes, 4 de junio de 2007

Mi favorito

De oliverio Girondo
No se me importa un pito que las mujeres
tengan los senos como magnolias o como pasas de higo;
un cutis de durazno o de papel de lija.
Le doy una importancia igual a cero,
al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco
o con un aliento insecticida.
Soy perfectamente capaz de sorportarles
una nariz que sacaría el primer premio
en una exposición de zanahorias;
¡pero eso sí! -y en esto soy irreductible- no les perdono,
bajo ningún pretexto, que no sepan volar.
Si no saben volar ¡pierden el tiempo las que pretendan seducirme!
Ésta fue -y no otra- la razón de que me enamorase,
tan locamente, de María Luisa.
¿Qué me importaban sus labios por entregas y sus encelos sulfurosos?
¿Qué me importaban sus extremidades de palmípedo
y sus miradas de pronóstico reservado?
¡María Luisa era una verdadera pluma!
Desde el amanecer volaba del dormitorio a la cocina,
volaba del comedor a la despensa.
Volando me preparaba el baño, la camisa.
Volando realizaba sus compras, sus quehaceres...
¡Con qué impaciencia yo esperaba que volviese, volando,
de algún paseo por los alrededores!
Allí lejos, perdido entre las nubes, un puntito rosado.
"¡María Luisa! ¡María Luisa!"... y a los pocos segundos,
ya me abrazaba con sus piernas de pluma,
para llevarme, volando, a cualquier parte.
Durante kilómetros de silencio planeábamos una caricia
que nos aproximaba al paraíso;
durante horas enteras nos anidábamos en una nube,
como dos ángeles, y de repente, en tirabuzón, en hoja muerta,
el aterrizaje forzoso de un espasmo.
¡Qué delicia la de tener una mujer tan ligera...,
aunque nos haga ver, de vez en cuando, las estrellas!
¡Que voluptuosidad la de pasarse los días entre las nubes...
la de pasarse las noches de un solo vuelo!
Después de conocer una mujer etérea,
¿puede brindarnos alguna clase de atractivos una mujer terrestre?
¿Verdad que no hay diferencia sustancial
entre vivir con una vaca o con una mujer
que tenga las nalgas a setenta y ocho centímetros del suelo?
Yo, por lo menos, soy incapaz de comprender
la seducción de una mujer pedestre,
y por más empeño que ponga en concebirlo,
no me es posible ni tan siquiera imaginar
que pueda hacerse el amor más que volando.

jueves, 31 de mayo de 2007

Volar


No soy yo quien escribe estas palabras huerfanas

Hoy la vida se me vino encima al amanecer, ya no podía salir de mis lagrimitas y menos de mis sabanas tramposas a las que les da por abrazarme cada vez que me siento así de “piltrafita”. Pero ya saben, uno hace lo que se le pega la gana y yo no podía dejarme ahí tirada viendo como el sol encendía las vidas de todos sin conseguir quitarme el frío. Con todo y mi moquito tendido me salí huyendo de las terribles guerras que hacían estallar como bombas a mis ojos. La primera mitad del día no fue fácil, no pude huir como lo había previsto y decidí mejor salir volando. Por eso les pongo estas dulces palabras que no son las mías pero que sirven para volar.
De Oliverio Girondo:

VUELO SIN ORILLAS

Abandoné las sombras,
las espesas paredes,
los ruidos familiares,
la amistad de los libros,
el tabaco, las plumas,
los secos cielorrasos;
para salir volando,
desesperadamente.

Abajo: en la penumbra,
las amargas cornisas,
las calles desoladas,
los faroles sonámbulos,
las muertas chimeneas
los rumores cansados,
desesperadamente.

Ya todo era silencio,
simuladas catástrofes,
grandes charcos de sombra,
aguaceros, relámpagos,
vagabundos islotes
de inestables riberas;
pero seguí volando,
desesperadamente.

Un resplandor desnudo,
una luz calcinante
se interpuso en mi ruta,
me fascinó de muerte,
pero logré evadirme
de su letal influjo,
para seguir volando,
desesperadamente.
Todavía el destino
de mundos fenecidos,
desorientó mi vuelo
-de sideral constancia-
con sus vanas parábolas
y sus aureolas falsas;
pero seguí volando,
desesperadamente.

Me oprimía lo flúido,
la limpidez maciza,
el vacío escarchado,
la inaudible distancia,
la oquedad insonora,
el reposo asfixiante;
pero seguía volando,
desesperadamente.

Ya no existía nada,
la nada estaba ausente;
ni oscuridad, ni lumbre,
-ni unas manos celestes-
ni vida, ni destino,
ni misterio, ni muerte;
pero seguía volando,
desesperadamente.

miércoles, 30 de mayo de 2007

Primero

Me encuentro sí, como muchos, frente a un monitor. Me encuentro frente a un monitor y pareciera no tener un propósito más grande que el de “perder el tiempo”. Para qué perder el tiempo, por qué no vivirlo, por qué no tomar parte y hacer lo que quiera con mí tiempo si al fin y al cabo es de las cosas que pasajeramente son mías y de nadie más. Y tecleo rápidamente y me desdoblo o me cuento a mí. Por un lado a mí para que no se me olvide lo que hago, lo que ya hice; para dentro de veinte años poder volver sobre estas líneas y recordar con los detalles que haya querido, los momentos que no quiero confiar tan sólo a mi buena memoria.

Por otro lado escribo porque de qué otro modo podría hacerme escuchar o leer y, aunque tal vez sea cierto que todo lo que decimos son mentiras y lo demás es silencio, escribo para que algún perdido trasnochador, madrugador o entusiasta navegante encuentre en mis letras ganas de hacer las propias o ganas de leer las de los demás (he de confesar que las palabras leídas a uno de mis mejores amigos me han puesto el pié para venir a caer en estos bajos mundos) y cuente sus mentiras como verdades o sus verdades como mentiras, pues al fin y al cabo todo viene a ser lo mismo si nos ponemos a pensar en la inefable comprobación de todas estas líneas escritas.

Finalmente escribo por la libertad tan bien representada en este interesante pasatiempo. La libertad de decirte que me mata la indiferencia ejercida por mi persona sobre tu boca, por las ganas que traigo de darme un balazo y echarte la culpa y decirte que eres tú, si, como lo mires o como lo leas mejor, tú el que provoca todo lo que escribo, y tú, el otro, el de junto, o tal vez el que vive a cuarenta kilómetros de mi casa, el que suscitará mis líneas más adelante, pero siempre “tú” el anónimo.